RADIO / BROADCAST
OPINIÓN . La revolución de la Radio tal como la conocemos. Escribe Freddy Ojea
Estamos en un momento y en condiciones de la sociedad, con los adelantos tecnológicos, las fuerzas políticas que inciden en la relación de las personas –como nunca- los medios, a los que se le han agregado la notable influencia de las redes sociales.
Aquí se está redefiniendo el papel de la Radio, como también el de la televisión y las redes.
En este panorama que hoy todos conocemos y con el que convivimos, los medios tradicionales tienen (y deben) aplicar algunos cambios y ese es el caso particular de la “televisión abierta” y la “Radio de antena” y de esta última nos ocupamos.
La revolución que hacemos referencia es que la Radio tiene que adaptarse al nuevo idioma de los medios, actualizar su dinámica, incorporar y superar distintos momentos, formas y contenidos.
Ejemplos que comprenden sugerencias pensadas con el fin de mejorar el idioma de la Radio: Darle más importancia a los análisis y menos a las primicias.
Hoy no es tan necesario dar la hora, el top, el clima, el tránsito, el valor del dólar o de la soja, la carne o el café. Hoy todas estas actualizaciones el público las tiene en el celular. Solo necesita saber que pasan, pero más porque pasan.
No importa tanto una prolija puesta en el aire, en este momento, importa más lo que se dice de cómo se dice.
Finalmente, la Radio tradicional necesita replantear todo su funcionamiento, pero todo: administrativo, comercial, interno, jurídico, sindical, técnico, comunicacional y cualquier otro que necesite revisión.
En esta etapa, tal vez, y lo más importante, hasta haya que replantear las estructuras clásicas de programación.
Porque creemos que el público espera una revolución de contenido. ¡Ojalá la Radio la dé, el oyente la espera!
Escribe Alfredo Freddy Ojea
Productor independiente de contenidos
