Pendiente porque en su gran mayoría quienes diseñan las programaciones radiofónicas, no conocen a las audiencias a las que van dirigidos los contenidos que colocan alegremente en las parrillas con la excusa de que es una programación ‘para “todos”. Suponiendo por ejemplo; que una estrella exitosa en la Tv tendrá el mismo resultado en la Radio.
Es la fidelización la que va a determinar el éxito o el fracaso de esas programaciones o de una unidad programática.
Esas audiencias están compuestas por potenciales consumidores, por lo tanto fidelizarlas es no solo indispensable, sino también prioritario.
Pero conseguir la lealtad de los públicos tiene que ser el resultado de una estrategia de comunicación y marketing que apunte a atender objetivos puntuales, esto es: Visibilidad del contenido.
Es importante que los contenidos para la audiencia sean visibles teniendo en cuenta la gran competencia que hay en el mercado, (Visibilizar el producto) a lo que deberemos sumar claridad en el target especifico al que irán dirigidos.
En la actualidad, tenemos herramientas que contribuyen eficazmente a este objetivo tales como las redes sociales y plataformas tecnológicas.
Una de éstas es YouTube, mediante la que podemos ver hoy por streaming a los conductores, locutores y periodistas, realizar su trabajo cotidiano en la Radio Visual y cuyos oyentes/consumidores pueden ser registrados mediante la IP de su computadora, lo que representa fidelidad en los datos de audiencia.
Contenidos destinados a las audiencias jóvenes y consumidoras, en redes como Twitter, Instagram, facebook, Tic Toc, y Spotify, permite el posicionamiento de la marca de radio pero también la atención y consumo de esas producciones diferenciados, es decir aquellos que son concebidas específicamente para las redes sociales.
La producción de Podcast, archivos de audio de contenidos variados emanados de las mismas entrañas de la Radio y realizados por profesionales que en ella ejercen, deben estar en el menú de la producción radiofónica, y cuyos consumos estan creciendo exponencialmente en todo el mundo.
No está de más recordar, que las generaciones más jóvenes ya no están en la sintonía analógica, menos aún en la de AM, por lo tanto producir contenidos específicos para cooptarlos en el cibermundo, tiene que ver con fidelizar audiencias y visualizar contenidos.
La Radio en general, se adaptó rápidamente a las nuevas tecnologías y al cambio en los hábitos de consumos culturales.
La apuesta hoy ya no es la Onda Media, pero sí lo es integrarse con otras herramientas a ese mundo virtual, es decir una Radio multiplataforma como anticipó el ya desaparecido profesor y analista, Cebrián Herreros, de la Universidad Complutense de Madrid, cuando se refería a la irrupción de las nuevas tecnologías en el mundo radiofónico, sobre todo desde la aparición de internet.
Una Radio hoy “no está completa” si no es visual y no cuenta con su propia página web en la que puedan visualizarse noticias en texto e imagen, audios de las principales notas de la jornada, recortes de los mejores momentos de la programación, columnas de opinión de los periodistas de la emisora, links que conduzcan a perfiles de Instagram, Facebook, columna de Podcast con presencia en Spotify, y transmitir por streaming entre otros. Una Radio integrada.
Sin embargo, actualmente varias emisoras de AM siguen apostando por el viejo sistema y por una audiencia adulta o envejecida al contratar animadores mayores, de más de 60 años que no les hablan a los más jóvenes, aunque ellos estén convencidos de que lo hacen…
Tal vez debería modificarse el lenguaje de los mensajes, generar nuevos códigos y observar las estrategias de la Radio de algunos países como Chile, que está mudando los contenidos de la Onda Media con otros lenguajes a la FM en busca de esos públicos, y al mismo tiempo representando competencia para las emisoras que transmiten en ese sistema de distribución, o bien transmitiendo sus contenidos en simultáneo por ambas frecuencias como en algunos casos de emisoras de Argentina, Colombia y España, siempre en busca de fidelizar a ese oyente anónimo y escurridizo.
Autor: Horacio Barrios
Periodista e investigador de Radio