El escándalo se desató cuando se divulgó la versión de que un bolso con cuatro millones de pesos en efectivo en el medio de la TV Pública generó malestar en el canal estatal que conduce Rosario Lufrano. Según pudo saber Perfil, el tesorero hizo los retiros en el banco por orden de un gerente y un director que ahora son investigados por una auditoría, ya que está prohibido realizar pagos en efectivo.
Ambos renunciaron por el caso y el dinero quedó resguardado en una caja fuerte, aunque advierten que “ya se hicieron algunos gastos”. No obstante, negaron la existencia de ese bolso y que el encargado se haya llevado el dinero a su casa.
Fuentes a las que accedió este medio aclararon que la plata que habían retirado del Banco Itaú es para el rodaje de una miniserie sobre Manuel Belgrano. La última de varias extracciones se hizo el pasado viernes 5 de marzo y sería la “primera vez que se detecta una irregularidad así” en la actual gestión porque antes no había rodajes. El pasado lunes se detectó la irregularidad, el martes se hizo pública, y ese mismo día el dinero fue llevado de la caja fuerte nuevamente al banco de donde salió.
La falta a la normativa se comete al manejar dinero en efectivo, algo prohibido en el canal público. “La forma correcta, es que por medio del Sistema de Gestión Documental Electrónica (GDE) la gerencia de producción le pida a administración financiera que haga los pagos. Siempre mediante transferencia. Es decir, se le pasa un listado, presupuesto y proveedores para realizar los pagos. Pero todo tiene que ser pedido a través del GDE, y el pago se tiene que hacer vía transferencia”, precisaron.
Sin embargo, destacaron que la persona encargada de los pagos es el tesorero, quien fue a extraer el dinero, y los responsables de cometer la falta son quienes dieron esa orden: Guillermo Siaria, director de administración financiera y Alejandro De Latorre, el gerente de administración financiera. También Ernesto Molinero, gerente de producción, hizo el pedido del dinero a la administración financiera, aunque no sería responsable directo.
No obstante, Siaria y Molinero presentaron las renuncias el martes a primera hora. Por su parte, De Latorre, es personal de planta. Para sancionarlo, suspenderlo o despedirlo, tiene que haber una auditoría que lo determine.
Por ese motivo es que Lufrano ordenó una auditoría que está realizando el Titular de la Unidad de Auditoría Interna en el marco de sus atribuciones como organismo de control interno y permanente. El auditor no es designado por las autoridades de RTA sino por la Sindicatura General de la Nación (SIGEN).
Fuente: Ramón Indart y Julián D’Imperio / perfil.com